Dosifica las tachuelas

Después de las vacaciones de verano regresamos con fuerzas renovadas y con muchas ganas de diseccionar la nueva temporada otoño/invierno 2012-2013 para hombre.


Empezamos esta nueva etapa con una de esas tendencias que llega a ser omnipresente, las tachuelas. Aun seguimos con buen tiempo en la mayoría del territorio español y ya más de uno está haciendo acopio de prendas con estas tan de moda inserciones de piezas metálicas. Tengo que reconocer que estoy a punto del empacho y eso que la temporada no ha hecho más que empezar y mira que eso de darle un aire rocker a nuestro look con algún elemento plagado de tachuelas me parece de lo más atractivo. Lo que creo que está ocurriendo es que las firmas están abusando de esta tendencia que, según creo, debe dosificarse casi con cuentagotas.

A pesar de todo esto sí que hay algunas prendas que me gustaría destacar. Me quejo mucho del exceso de oferta en las tiendas, pero seguro que acabaré comprando dos o tres piezas con esta tendencia roquera. El primer sitio en el que imagino ya habréis notado esta omnipresencia de la tachuela es Zara. El buque insignia del grupo Inditex ha puesto a trabajar a marchas forzadas su remachadora y coloca tachuelas por aquí y por allá (principalmente en la colección de mujer, aunque nosotros no nos salvamos).
Entre todos me gustaría destacar estos artículos: una biker de piel, un chaleco denim con acabado lavado y unos zapatos de doble hebilla con efecto desgastado. 

Hay otras firmas que han apostado por la tachuela, pero entre todas me gustaría subir una vez más a los altares a Burberry Prorsum. Creo que la colección a/w 12-13 es espectacular y las tachuelas están en su justa medida en complementos como los guantes o los bolsos de mano. 
Esta semana también he descubierto gracias a mi amigo Antonio Jurado de 'Yo a Vogue y Tu a California' la web de Il Maltese Lab que tiene unas Converse customizadas que son espectaculares. 
Y el exceso absoluto en el uso de la tachuela nos los trae Frankie Morello en su última colección con prendas como esta blazer repleta de aplicaciones metálicas. ¿Esto ya es demasiado, no?
En definitiva y como he querido dejar claro en el titular, hay que dosificarse chicos. No compremos todo con tachuelas que en unos meses nos empacharemos y luego el invierno es muy largo. Un par de piezas (una prenda y un complemento) pueden ser una proporción equilibrada para no dejar de usar esta tendencia y no caer en el barroquismo metálico.




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